miércoles, 5 de marzo de 2014

Cuenca, que bonita eres!

Cuenca es una pequeña ciudad de Castilla La Mancha situada al Norte de la provincia que lleva su mismo nombre. Cuenta con casi 57.000 habitantes, como digo, una ciudad pequeñita pero con un gran encanto.

Mi interés por este municipio radica en las maravillosas casas colgadas, que no colgantes, y en las hoces del río Huécar y Júcar.

 La ciudad se divide en dos zonas claramente diferenciadas, el casco antiguo y la ciudad nueva. La parte antigua se sitúa sobre un cerro rocoso bordeado por la hoz del Júcar al norte, y por el sur, por la hoz del Huécar, afluente del Júcar. Mientras que al oeste y sur de la zona más antigua de la ciudad, se ubica la parte nueva de la ciudad, cuyo centro neurálgico es la calle Carretería.

Frente a la hoz del río Huécar nos encontramos con las Casas Colgadas, también denominadas Casas Voladas o Casas del Rey.
Son varios edificios civiles, en concreto, perduran actualmente tres de estas casas. Son un elemento arquitectónico muy característico de la ciudad, fundamentalmente porque los balcones son de madera. Las casas se denominan así, porque los balcones, en voladizo, no se soportan sobre ningún material sólido. Están fijadas a la pared por soportes diagonales de madera.


Casas colgadas. Cuenca.

Casas colgadas y puente que cruza la hoz del río Huécar.

Para admirar las construcciones de voladizos sobre la hoz del Huécar, hay que cruzar el puente que lo cruza. Da un poco de impresión, pero la vista es maravillosa.

Si realizáis la visita a pie por la ciudad, no dejeis de subir al punto más alto de la ciudad, el Barrio del Castillo, desde donde se puede admirar toda la ciudad.
Vistas desde el Mirador ubicado en el Barrio del Castillo.

Vistas desde el Mirador ubicado en el Barrio del Castillo. El edificio ubicado a la izquierda de la fotografía es el Parador de Turismo (Convento de San Pablo).

Es recomendable antes de comenzar la visita ir al centro de recepción de turistas. Si venís por la Autovía A-40 desde Madrid, o por la N-400, a la entrada encontrareis el punto de información sin ningún problema. E incluso, podéis quedar el coche aparcado allí o por el centro para luego recorrer la ciudad a pie.

Después de dejar el coche, lo más recomendable es empezar la visita por el paseo del Huécar, dónde se puede observar la conocida Hoz del río Huécar, como se ha comentado anteriormente, y además ver las casas colgadas. Durante el paseo os encontrareis con otros elementos arquitectónicos como el Teatro Auditorio de la ciudad, que se encuentra casi encajado en la montaña.

Teatro Auditorio de Cuenca.

Teatro Auditorio de Cuenca.

Siguiendo por el paseo de la Hoz del Huécar se pueden observar las casas con voladizos que comentábamos antes. Resulta espectacular que las casas se sujeten con listones de madera sobre la piedra.

Arquitectura de voladizos

Siguiendo con la visita, nos adentramos al casco antiguo dejando atrás la Hoz del Huécar. Callejeando llegamos a la Plaza Mayor de la ciudad dónde se encuentra la Catedral y el Ayuntamiento.

Ayuntamiento de Cuenca. Plaza Mayor.

Catedral de Santa María y San Julián.

Fachadas de las viviendas del siglo XVII que rodean la Plaza Mayor de Cuenca.


Hay que destacar que por toda la ciudad vieja, la trama de colores de las fachadas de las casas sigue el mismo patrón, tonos amarillos, rosáceos, blancos y azules. Es algo muy característico de la ciudad y que llamó mi atención.

Seguimos la visita desde la Plaza Mayor por la calle San Pedro y Trabuco hacia el Barrio del Castillo, dónde se puede admirar toda la ciudad y tomarse unas tapas en los bares de la calle Trabuco.
Vista de la Catedral desde las ruinas del Arco de Bezudo.

Vistas de la calle Trabuco, subida hacia el mirador, desde las ruinas del Arco de Bezudo.

Calle Trabuco.

Parador de Turismo

Parador de Turismo

Arco de Bezudo, restos de la fortaleza del Castillo y restos de la muralla. Se puede acceder mediante unas escaleras a la parte alta del arco y poder así admirar las maravillosas vistas de la ciudad.


Me despido encantada de haberos enseñado un poquito de la ciudad de Cuenca, y que os haya animado a a visitarla. Mi espinita, la ciudad encantada, ubicada a unos 30-40 km de Cuenca, que tendré que visitar en otra ocasión.

Pd. Si vais en febrero, abrigaros bien, que hace muchísimo frío!!!